top of page

Editorial




marzo de 2024


Querida comunidad lectora: 


Ofrecemos una sincera disculpa por ausentarnos durante dos años sin explicación. Pluvia fue un proyecto que surgió en el contexto de la pandemia, cuando el encierro modificó nuestros ritmos y nos permitió crear un espacio para concebir, organizar, escribir y materializar cada número de la revista con fluidez y naturalidad. El 2022 trajo muchos cambios en nuestras vidas a los que fue difícil adaptarnos. Nos dejamos arrastrar por nuevas rutinas y ritmos vertiginosos que cambiaron los ánimos con que impulsábamos la revista. Con la conciencia de que a la creatividad hay que hacerle el tiempo dentro de las rutinas tan complicadas que nos enmarcan, hemos decidido retomar este espacio que nos ha aportado tanta inspiración y vitalidad.


Agradecemos mucho la paciencia con la que nuestro público lector y nuestras colaboradoras y colaboradores nos expresaron muestras de apoyo, de interés y de preocupación por la ausencia de Pluvia. Eso nos ha motivado aún más a volver. El sentido original de la revista se ha mantenido intacto y a él se ha sumado nuestra conmoción ante los eventos del mundo en el momento presente, particularmente el genocidio en Palestina, al cual dedicaremos el próximo número de nuestra revista.


Volvemos con el décimo sexto número que, con mucha pena, habíamos dejado pendiente desde abril de 2022. El tema de éste es Mujeres y ciencia. Expresamos nuestra gratitud a quienes enviaron sus colaboraciones desde que abrió la convocatoria y las presentamos ahora con mucha emoción de regresar.


Alondra Velasco Morón nos vuelve parte de su búsqueda de un suelo fértil, más aireado y extenso que la academia patriarcal, para poder sembrar sus inquietudes científicas.

Diana Galván reflexiona en torno a lo que significa ser una mujer científica a través de la relación con su madre y con las científicas del pasado.


Harumi Takano Rojas nos regala una colaboración ilustrada que nos invita a adentrarnos en la magia de la curiosidad.


Sofía Abreu describe en un poema su compleja relación con el Álgebra, con Algebrita, y vuelve a ser la niña que descubrió con asombro las matemáticas en la vida cotidiana.


Erika Luna cuestiona la concepción patriarcal de la ciencia y expresa su ajenidad a esta forma de hacer conocimiento científico.


Andrea Cedquo nos invita a conocer su encuentro con la ilustración científica a través de trazos y reflexiones sobre la conservación ambiental de especies nativas.


Yolanda Robledo-Arratia reflexiona y cuestiona las formas de visibilizar a las mujeres en el ámbito científico ofreciéndonos, lo que es difícil de encontrar, posibilidades y soluciones a nuestro alcance.


Las colaboradoras expresan una necesidad urgente de reinventar lo que comprendemos como ciencia a partir de la experiencia de ser mujer y de lo que este hecho aporta al pensamiento sobre la realidad. El conocimiento patriarcal ha afectado a todas las disciplinas en general, pero se ha apropiado particularmente del llamado pensamiento científico, bajo el velo de la supuesta objetividad masculina. El paso por la academia ha impactado la vida de las autoras de este número y esperamos que Pluvia signifique un espacio fresco en donde plantear sus inquietudes y comenzar a tejer relaciones distintas, con ellas mismas, entre nosotras y con el universo que nos rodea.


Con mucha gratitud, 


Adriana Fournier Uriegas

Mariana Costa Villegas

Mariana Abreu Olvera

bottom of page